Francisco Ramón y su familia están reformando una casa muy antigua que acaban de comprar. Las paredes son de tapial, una técnica de milenaria de construcción con tierra que aún se utiliza en muchos lugares. Él quiere rehabilitar la pared manteniendo sus características y nos ha escrito para contrastar con la Red de Expertos de mimbrea las soluciones que ha pensado. Nos ayuda Alfonso M. Cuadrado de aRRsa! Plataforma Creativa y nos propone soluciones alternativas explicadas paso a paso.
Aquí va la duda de nuestro lector, Francisco Ramón:
Buenas noches. Hemos comprado una casa cuyas paredes medianeras son de tapia (tierra), tiene unos 250 años y la estamos reformando. En el lavabo hemos quitado las baldosas colocadas sobre mortero y éste ha saltado de la pared, por lo que la tapia ha quedado vista. Para volver a poner baldosas he pensado en revocar la tapia con cal NHL5, con una primera capa de agarre rica en arena para darle más consistencia a la tapia y permitir que respire. Después levantar un tabique a unos 3 cm con mahón de 4cm y mortero de cal y sobre éste colocar las baldosas. Por otra parte, el suelo de la casa es de tocho macizo sobre tierra compactada y vigas de madera y estoy pensando en quitarlo y colocar un planché de hormigón de cal con mallazo de fibra de vidrio. Cómo lo veis? Creéis que son buenas soluciones? Mi intención es respetar al máximo las características y materiales de la casa. Gracias.

- Picar todo el mortero superficial hasta dejar visible el muro de tapial. Observar si existen humedades o zonas del muro en las que el material se disgregue fácilmente. Retirar el material que se encuentre suelto.
- Reconstruir estas partes mediante la técnica del tapial (con encofrados de madera, en capas de 15 cm., compactadas) o mediante ladrillos de adobe.
- Instalar malla metálica flexible (p.e. mallas con vena) en ambas caras del muro de forma simultánea. La malla puede recubrir toda la superficie del muro o disponerse en bandas horizontales, en la parte superior y en la inferior, conectadas mediante bandas de refuerzo verticales. Para unir la malla de la cara exterior con la interior, se realizan perforaciones en el muro (distanciadas entre sí unos 20 cm.) en las que se introducen alambres que las van fijando y ayudan a mantener comprimido el tapial. Las perforaciones se rellenan con mortero de cal y arena.
- Posteriormente se revocan las dos caras con un mortero de cal y arena (0-3 mm.). Pueden realizarse dos capas, con un intervalo de dos días:
- La primera de agarre (dosificación: cal NHL5: arena, 1:2)
- La segunda de terminación, a la que puedes añadir cemento, en la misma proporción que la cal, para mejorar el agarre de las baldosas. (dosificación: cal NHL 5: cemento: arena, 1:1:3)

